Cómo introducir los purés en la dieta del bebé.

Imagen de www.dietacontmx.blogspot.com
Imagen de http://www.dietacontmx.blogspot.com

Durante el verano me tocó empezar con el maravilloso mundo de los purés de verduras. ¡Y me había dejado el papelito informativo en casa! No importa que sea la tercera. Aunque tuviera 15 hijos, con cada uno es como volver a empezar. Se me olvidan los tiempos, el orden, las cantidades… Así que no tuve más remedio que recurrir al Doctor Google para salir del paso.

No me fue nada fácil encontrar información completa sobre este tema. Muchos sitios te daban los tiempos, pero no el orden, o a la inversa… hasta que llegué a una página de CRECER FELIZ que me pareció que explicaba bastante bien cómo introducir los purés de verduras en la dieta del bebé.

Por si estáis en esa misma situación, os incluyo el artículo.

Incluyo algún comentario en azul porque no quiero modificar el artículo. Prefiero incluirlo completo y literal, para no dar lugar a malas interpretaciones o  «sacadas de contexto».

Ahí va:

Los primeros purés de verduras de los bebés

Hasta hace poco tiempo se recomendaba iniciar al bebé en los purés verdes a los 4 meses y medio, pero hoy los pediatras (siguiendo las directrices de los nutriólogos de la OMS y de las Sociedades Española y Americana de Pediatría) aconsejan hacerlo cuando el pequeño tiene alrededor de 6 meses.

No obstante, hay niños que a los 5 meses ya no tienen bastante con la leche y las papillas de cereales y otros que con esta dieta se sienten plenamente satisfechos. Cíñete a las recomendaciones del pediatra, que es quien mejor conoce su evolución y sus necesidades nutricionales, y observa el comportamiento que tiene tu pequeño ante la comida, porque él mismo te indicará, a su manera, si necesita una dieta más contundente.

¿Se muestra inquieto después de comer? ¿Le interesa lo que tú comes? ¿Hace chasquidos con la boca, como si masticara? Entonces está preparado para que le inicies en los purés, lo que no implica, ni mucho menos, que dejes de darle el pecho si le estás amamantando.

DE UNA SOLA VERDURA

Si el pediatra te da permiso para empezar con los purés:

Durante unas semanas, pon de vez en cuando en su biberón de leche un poco de caldo de cocer las verduras (sin sal), para que se habitúe a su sabor. Yo esto no lo he hecho con ninguna de las tres, ni me lo recomendó así el pediatra, ni lo había oído nunca.

Una vez que lo acepte bien, prepárale sus primeros purés verdes. Hazlos de una sola verdura (ya sea zanahoria, puerro, calabaza…), con una base de patata (una porción de patata por cada dos de verdura). Así, si alguna le sienta mal, sabrás enseguida cuál es.

Cuece las verduras (sin sal) lo justo para que estén blanditas, con la menor cantidad de agua posible (hacerlo en la olla a presión es lo más adecuado), porque una cocción prolongada hace que los alimentos pierdan sus nutrientes.

En vez de batirlas, tritúralas con el pasapurés (así el puré tendrá una textura más agradable, sin hebras que podrían provocarle arcadas) y antes de hacerlo, añade una cucharada de aceite de oliva suave, de 0,4 de acidez.

Si te sale espeso, acláralo con un chorrito de la leche habitual que das a tu hijo. Y si te queda demasiado líquido, espésalo echando un cacito de los cereales que toma a diario.

Para evitar rechazos, al principio échale sólo dos o tres cucharadas de puré en el biberón del mediodía. Tampoco hice esto. Intento no incluir el puré en el biberón, para que aprenda a distinguir: biberón – leche, cuchara – puré. Así evito que si no le gusta el puré le coja asco al biberón.

Día a día espésalo más, hasta que esa toma sea sólo de puré y dáselo con la cuchara. A partir de entonces, éste sustituirá a la papilla de cereales que le dabas para comer.

CADA VEZ MÁS VARIADOS

Cuando tu pequeño se habitúe a estos purés suaves, se los podrás hacer mezclando dos o tres verduras, de sabor más intenso que las anteriores (calabacín, brécol, acelgas…).

Salvo las que provocan gases, como la coliflor, las coles y el repollo, y las que tienen un alto contenido en nitratos, como la remolacha y el nabo, que no debe tomar hasta los 18 meses, puedes darle todas las demás.

No añadas dos o tres verduras nuevas de golpe, incorpora una por una, y deja un intervalo de cuatro o cinco días entre ellas. Si hay alguna que no tolera, no se la des hasta que te lo diga el pediatra. Así le iniciarás en las verduras sin problemas.

Como la peque no engorda mucho, pronto empecé a meter pollo en los purés (como a los 6 meses y medio) y ternera (a los 7 meses). Hasta los 8 meses no se introduce el pescado.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s