Hace mucho que no publicaba una receta, ¿verdad?

Y es que los postres que más me gustan ya forman parte del «recetario charquero«. Pero… ¡me faltaba una muy pero que muy importante! Las rosquillas de anís… ¡de mi madre!. ¡Oro puro!

La receta es para hacerlas en la Thermomix, pero puede adaptarse al método tradicional (batidora y listo, tampoco tiene mucho misterio).

¡Ahí va!

Ingredientes:

• 500grs. de harina normal, no de repostería.
• 200 grs. de azúcar
• 100 grs. aceite de girasol u oliva suave
• 1 sobre de levadura (por ejemplo Royal)
• 50 grs. de anís (por ejemplo Del Mono)
• media cucharadita de anises (semillas de anís) (opcional)
• 2 huevos
• la piel de 1 limón (evitando lo blanco)

Elaboración:

1. Triturar el azúcar con los granos de anís
2. Añadir la piel del limón y programar 30 segundo velocidad 5 y 1 minuto velocidad 10 (progresivo).
3. Añadir el aceite de girasol con los 2 huevos y el anís liquido. Batir a velocidad 6, 8 segundos.
4. Echar la mitad de la harina (250 grs.) con el sobre de levadura y programar velocidad 6, 8 segundos.
5. Añadir el resto de harina y programar velocidad 6, 15 segundos. La masa tiene que quedar blanda, que se pueda manejar con las manos. Si queda muy líquida echar 50 grs. más de harina y programar velocidad espiga, 15 segundos.
6. Sacar la masa con las manos impregnadas en aceite.
7. Hacer bolitas y después hacerles un agujero en el centro o hacer gusanillos y unir los extremos haciendo un círculo. Aquí los niños se lo pasan pipa-pipa.
8. Freír en abundante aceite de oliva muy caliente.
9. Echarles por encima un poco de azúcar.

¡Y a disfrutar!